Principios básicos para la planeación de un pozo
Como coloquial mente se dice no solo en la industria del petróleo y el gas, sino en muchos otros sectores "esto es arte", decimos esto porque para los ingenieros a cargo de este tipo de proyectos el desarrollo de la planeación de un pozo se convierte en un arte por todo lo que implica.
A continuación te mostramos cuales son los principios más básicos para la planeación de un pozo, para que la próxima vez que te pregunten en la universidad tu ya sabes con que responder:
Trayectoria del pozo. El primer factor a considerar en la
planeación de un pozo es tener un objetivo, ya que este determinara la trayectoria de nuestro pozo, aunque resulte obvio muchas veces se suele pasar por alto este paso seleccionando múltiples objetivos, muchos de los cuales se encuentran fuera de nuestro alcance, posterior a seleccionarlo debemos saber que se espera de él, si se quiere
extraer petróleo o gas.
Esta se vuelve también primera oportunidad que el equipo tiene para minimizar un posible daño,
esto por medio de la selección de una trayectoria no tan agresiva y de objetivos factibles a ser alcanzados.
Algunas
de las consideraciones que debemos tener en cuenta al seleccionar la
trayectoria del pozo son: localización de objetivo, posición del equipo de
perforación, inclinación y dirección, estabilidad del agujero y herramientas de
medición de fondo del pozo.
Localización de
objetivos. Antes de
realizar un proceso de perforación, es de vital importancia tener definido nuestro objetivo, algo parecido al punto anterior sin embargo es de gran importancia que quede claro, ya que muchas veces uno de los principales problemas de
pegadura de tubería es querer alcanzar demasiados objetivos de forma simultánea,
exponiendo el pozo a posibles derrumbes y por ende a pegaduras de tubería.
Es
verdad, en muchas ocasiones por diversas circunstancias principalmente de
localización es inclusive “necesario” tomar ciertos riesgos para llegar a
objetivos simultáneos al que se está perforando, aunque antes de desviar nuestra trayectoria original debemos de plantearnos si no resultaría más económico perforar nuevos pozos.
Inclinación y
dirección del pozo.
Otro de los factores a considerar es la inclinación del pozo, ya que a medida
que la inclinación incrementa será más difícil liberar la tubería en caso de
que esta se pegara, además que el arrastre en el agujero reduce la capacidad de
movimiento libre de la tubería.
Si analizamos un poco estos puntos todos son hasta el momento influenciados por la selección de la trayectoria del pozo.
Planos de
estratificación de ángulos elevados.
Evitar perforar sobre planos de estratificación con de ángulos elevados nos
ayudara a tener mayor estabilidad en nuestro pozo, por eso se dice que los
planos de estratificación gobiernan en cierta manera la trayectoria del pozo,
ya que se busca perforar sobre ellos.
Ya que perforar en zonas relativamente blandas puede afectar la trayectoria y la estabilidad de nuestra columna de perforación, llegando a afectar considerablemente la trayectoria de nuestro pozo.
Producción horizontal. Si nuestro objetivo se encuentra a
cierta distancia de nuestro equipo de perforación o existen sitios de interés que son fiables a
ser alcanzados, se puede recurrir a una perforación horizontal o desviada,
teniendo en cuenta que el diseño de esta debe ser específica para cada pozo, ya
que el tipo de pozo que se perforo para alcanzar un pozo no funcionara adecuado en otro.
Para realizar esta operación debemos de realizar los análisis correspondientes antes de desviar nuestra trayectoria, debido a que a mayor inclinación existe mayor posibilidad del asentamiento de sólidos en el pozo.
Diámetro del agujero y diseño del programa de tuberías de revestimiento. Al seleccionar el tamaño de la tubería de revestimiento es importante considerar el tamaño de agujero que esta nos proporcionara, ya que en gran medida el diámetro del pozo está determinado por el tamaño de la tubería de revestimiento.
El
tamaño del agujero debe ser el indicado, de tal forma que exista suficiente
espacio para realizar la limpieza del pozo, que haya estabilidad en el agujero,
que no exista pegadura por presión diferencial y que la posibilidad de generar
un empacamiento sea baja, por lo general a mayor diámetro existe un menor riesgo de pegadura por presión diferencial, sin embargo la estabilidad del agujero se vera afectada.
Selección de barrenas. Escoger la barrena con la que se va a perforar el pozo es algo importante, ya que de esta selección se podrán evitar posibles pegaduras de tubería, una ineficiente selección de la barrena conlleva a viajes innecesarios para cambiarla, dejando el pozo expuesto.
BHA. El aparejo de fondo, mejor conocido como BHA debe de proporcionar el peso suficiente a la barrena para lograr estabilizarla y evitar la serie de vibraciones que esta experimenta.
La
implementación de lastrabarrenas le brinda a la barrena un peso constante y
uniforme al perforar, aunque hay que tener precaución al usarlos, ya que si se
inclinan demasiado puede ser contraproducente, ya que generaran un desgaste
mayor hacía un lado de nuestro equipo reduciendo así la vida útil de la barrena.
Limpieza del agujero. Es de suma importancia remover los recortes que la barrena va generando dentro del pozo, esto para que no vuelvan a ser triturados, siendo el objetivo de la limpieza el remover los recortes y evitar problemas relacionados con estos, una limpieza efectiva se puede lograr con gastos elevados.
Si tenemos una limpieza ineficiente en nuestro pozo existe la posibilidad que los recortes se asienten en nuestra formación ocasionando pegaduras.
Fluido de perforación. Es necesario que los ingenieros de lodos adapten el fluido de perforación a las condiciones del pozo, aunque suele resultar un poco costosa esta parte del proyecto.
Los fluidos de perforación son uno de los responsables más grandes en la pegadura de tubería, siendo la densidad de este la que afecta directamente, la densidad del fluido brinda estabilidad a la formación, si perforamos con lodos de baja densidad, será una perforación más rápida, pero esto puede ocasionar inestabilidad en el agujero.
Control de sólidos. Los problemas en el fondo del pozo se optimizan cuando existe una correcta limpieza de los sólidos en la formación, si no contamos con un óptimo equipo para la remoción de estos, diversos problemas como enjarres de gran espesor, embolamiento de la barrena, desgaste del equipo, malas cementaciones y perdidas de circulación pueden presentarse incurriendo en la pegadura de tubería.
Como
ya vimos hay ciertas consideraciones que debemos de tener en cuenta al momento
de planear un pozo, cada una de estas cumple con una función sumamente
importante, la ausencia de una de estas o la deficiente implementación de alguna puede ocasionar problemas en la planeación del pozo, por eso es de suma
importancia que al momento de llevar a cabo la planeación de un pozo prestemos mucha atención a cada sección.
¡Que buen artículo! Excelente
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